martes, 29 de septiembre de 2009

un gran recuerdo


EL 28 DE SEPTIEMBRE SE PRODUJO EL ANIVERSARIO DE CONFUCIO FECHA DE NACIMIENTO.




China recordó hoy el 2.560 aniversario del nacimiento de su mayor filósofo, Confucio, con una ceremonia a la que asistieron unas 10.000 personas en su localidad natal, Qufu, en la provincia este de Shandong. La pequeña ciudad organizó asimismo un Festival Internacional Cultural sobre Confucio, que incluyó un nuevo espectáculo musical sobre la vida del filósofo.




La filosofia de Confucio está basada en la buena conducta en la vida, el buen gobierno del Estado (caridad, justicia, y respeto a la jerarquía), el cuidado de la tradición, el estudio y la meditación. Las máximas virtudes son: la tolerancia, la bondad, la benevolencia, el amor al prójimo, la piedad filial y el respeto a los mayores y antepasados.
Según Confucio, para mantener una sociedad próspera que viva en armonia se deben recuperar las tradiciones de antiguos sabios, respetar la jerarquia tanto desde el Estado como en la vida familiar.
Algunas de sus citas más influyentes son:
“Algún dinero evita preocupaciones; mucho, las atrae.”
“Aprender sin pensar es inútil. Pensar sin aprender, peligroso.”
“Aquél que procura asegurar el bienestar ajeno, ya tiene asegurado el propio.”
“Cuando el objetivo te parezca difícil, no cambies de objetivo; busca un nuevo camino para llegar a él.”
“Cuando estamos frente a personas dignas, debemos intentar imitarlas. Cuando estamos frente a personas indignas, debemos mirarnos a nosotros mismos y corregir nuestros errores.”
“Donde hay educación no hay distinción de clases.”
“El hombre superior es modesto en el hablar, pero abundante en el obrar.”
“El lenguaje artificioso y la conducta aduladora rara vez acompañan a la virtud.”
“El más elevado tipo de hombre es el que obra antes de hablar, y practica lo que profesa.”
“Esperar lo inesperado. Aceptar lo inaceptable”
“En un país bien gobernado, la pobreza es algo que avergüenza. En un país mal gobernado, la riqueza es algo que avergüenza.”
“Hay tres caminos que llevan a la sabiduría: La imitación, el más sencillo; la reflexión, el más noble; y la experiencia, el más amargo”.
“Me lo contaron y lo olvidé, lo vi y lo entendí, lo hice y lo aprendí.”
“No contestes a una palabra airada replicando con otra de igual tenor. Es la segunda, la tuya, la que seguramente os llevará a la riña.”
“Nunca hagas apuestas. Si sabes que has de ganar al otro, eres un tramposo…Y si no lo sabes, eres un tonto.”
“Saber que se sabe lo que se sabe y que no se sabe lo que no se sabe; he aquí el verdadero saber.”
“Se puede quitar a un general su ejército, pero no a un hombre su voluntad.”
“Sólo puede ser feliz siempre el que sepa ser feliz con todo.”
“Un caballero se avergüenza de que sus palabras sean mejores que sus actos.”
“Uno que no sepa gobernarse a sí mismo, ¿cómo sabrá gobernar a los demás?.”
Estas son las que he seleccionado, espero que os gusten y os parezcan una buena inspiración sobre la que regresar cuando se torne necesario.

sábado, 26 de septiembre de 2009

El hombre de vida inexplicable LEYENDAS ARABES II

Había una vez un hombre llamado Moyut. Vivía en una aldea en la que había obtenido un puesto como pequeño funcionario y parecía muy probable que fuese a terminar sus días como inspector de pesas y medidas. Una tarde, cuando estaba caminando por los jardines de un viejo edificio cerca de su casa, el Jádir -misterioso guía de los sufíes- se le apareció vestido con una túnica de brillante verde. Moyut se encontró con el Jádir y el Jádir le dijo:
-Hombre de brillantes perspectivas, deja tu trabajo y encuéntrame junto a la ribera del río dentro de tres días.
Y desapareció.
Moyut fue a ver a su superior, conmovido por este encuentro, y le dijo que tenía que partir. Todo el mundo en la aldea se enteró pronto de esta decisión, y dijeron: "Pobre Moyut, se ha vuelto loco". Pero como había muchos candidatos para su puesto no tardaron en olvidarlo. En el día señalado Moyut se encontró con el Jádir, quien le dijo:
-Quítate las ropas y arrójate al río. Quizás alguien te salvará.
Moyut lo hizo sin hesitar, aunque se preguntaba si se había vuelto loco. Puesto que sabía nadar no se hundió, pero fue arrastrado por las aguas largamente antes de que un pescador lo hiciera subir a su bote y le dijera:
-Hombre loco, la corriente es muy fuerte, ¿qué estás tratando de hacer?
Moyut dijo:
-Realmente no lo sé.
-Estás loco -dijo el pescador-, pero te llevaré a mi cabaña junto al río, y veremos qué puedo hacer por ti.
Cuando el pescador descubrió que Moyut hablaba bien, aprendió de él a leer y a escribir. En cambio le dio alimento y un lugar donde habitar. Moyut ayudaba al pescador en su trabajo. Después de unos pocos meses el Jádir volvió a aparecer, esta vez al pie de la cama de Moyut, y le dijo:
-Levántate y deja a este pescador. Ya veremos qué se hace contigo.
Moyut salió inmediatamente de la cabaña, se vistió como pescador y vagabundeó hasta llegar a una carretera. Cuando se hizo el día vio a un agricultor en un burro en su camino hacia el mercado.
-¿Buscas trabajo? -le preguntó el agricultor-, porque necesito a un hombre que me ayude para traer de vuelta algunas compras que debo hacer.
Moyut lo siguió. Trabajó para el agricultor durante casi dos años, tiempo en el cual aprendió bastante sobre agricultura, pero sobre ninguna otra cosa. Un atardecer, mientras estaba limpiando algodón, se le apareció el Jádir y le dijo:
-Deja este trabajo, ve a la ciudad de Mosul y usa los ahorros para convertirte en un mercader de pieles.
Moyut obedeció. En Mosul se hizo conocido como mercader de pieles y no volvió a ver al Jádir durante tres años. Había ahorrado una suma considerable de dinero y estaba pensando en comprar una casa, cuando el Jádir volvió a aparecérsele y le dijo:
-Dame tu dinero. Vete de esta ciudad. Ve tan lejos como Samarkanda, y trabaja allí como almacenero.
Moyut lo hizo. En realidad empezó a mostrar signos bastante ciertos de iluminación. Curaba a los enfermos, servía a sus conciudadanos y durante su tiempo libre notaba que los misterios se iban profundizando en él cada vez más acentuadamente. Filósofos, hombres de negocios, lo visitaban y le preguntaban:
-¿Con quién estudiaste?
-Es difícil decirlo -contestaba Moyut.
Sus discípulos le preguntaban:
-¿Cómo empezaste tu carrera?
Él decía:
-Como un pequeño funcionario.
-¿Y la abandonaste para dedicarte a la mortificación?
-No. Simplemente la abandoné -decía Moyut.
Y sus discípulos no lo entendían. La gente se le acercaba para escribir la historia de su vida.
-¿Qué has sido en tu vida? -le preguntaban.
-Salté a un río, me convertí en pescador; después me fui de una cabaña en la mitad de una noche; después de esto me volví agricultor, y mientras estaba limpiando algodón cambié y fui a Mosul, donde me convertí en un mercader en pieles. Ahorré algún dinero allí, pero lo dejé, y después vine a Samarkanda y trabajé como almacenero. Y aquí es donde estoy ahora.
-Pero esta conducta inexplicable no ilumina para nada tus dones tan extraños y tus ejemplos maravillosos, decían los biógrafos.
-Así es -decía Moyut.
De tal suerte, los biógrafos organizaron para Moyut una historia muy excitante y maravillosa, porque todos los santos deben tener su historia, y la historia debe estar de acuerdo con el apetito del oyente, no con las realidades de la vida. Y nadie puede hablar del Jádir directamente. Tal es la razón por la cual esa historia no es cierta. Es una representación de la vida. Esta es la verdadera vida de uno de los más grandes sufíes.

jueves, 24 de septiembre de 2009

leyenda arabe PRECIOSA



Dice una Leyenda Árabe que dos amigos viajaban por el desierto y en determinado punto del camino, discutieron y uno dio una bofetada al otro. El agredido no reaccionó. Se limitó sólo a escribir en la arena: “Hoy mi mejor amigo me golpeó en el rostro”. Siguieron adelante y llegaron a un oasis, donde resolvieron bañarse.
En ese momento, el que recibió la ofensa comenzó a ahogarse, pero fue salvado por el amigo. Al recuperarse, cogió un canivete y escribió en una piedra: “Hoy mi mejor amigo me salvó la vida.”
Intrigado, el otro indagó: – Por qué, después que yo te ofendí tú escribes en la arena y, ahora, repites el mismo gesto en la piedra? Sonriendo, él respondió:
- Cuando un gran amigo nos lastima, debemos escribir donde el viento del olvido y del perdón se encargue de emborronar y borrar el recuerdo.
Por otro lado, cuando algo bueno nos acontece, debemos grabarlo en la piedra de la memoria y del corazón, donde viento alguno en todo el mundo no podrá borrarlo.

domingo, 13 de septiembre de 2009

RAMIRO CALLE "respuestas"


Es posible aliviar el dolor agudo con meditación?
Por supuesto. Hay muchas técnicas de meditación para poder observar el dolor sin identificarse con él y mantener el sosiego. Con este procedimiento logramos estar mucho más relajados y, por lo menos, no añadir dolor al dolor. Como decía Buda, el dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional.

Querido Ramiro. Soy una iniciada en yoga gracias a una antigua alumna suya y me gustaría realizar un viaje espiritual a la India, ¿qué lugar, tiempo, espacio,etc. me recomendaría?
Por lo menos una veintena de días y podrías visitar Risikesh, Benares y toda la ruta santa de los himalayas. Podrías contactar con comunidades espirituales y quedarte unos días en las mismas recibiendo clases de yoga y meditación.

En sus entrevistas radiofónicas siempre he notado bastante crispación cuando habla de la falta de valores de la sociedad actual. ¿Donde queda la serenidad que propicia el yoga?
Serenidad no quiere decir falta de firmeza y de contundencia y de poder incluso ser una ácrata sin acritud. Gandhi era el hombre más sereno y más firme y pudo expulsar de la India al imperio más poderoso del mundo. Lo que no me gusta es comulgar con piedras de molino ni plegarme a los impulsos de borreguismo de muchas parcelas de esta sociedad. Hay que ser un guerrero espiritual, sereno, ecuánime, pero firme.

Lo mejor para estar "equilibrado" es............
Una actitud vital basada en la ecuanimidad, el sosiego, la lucidez, el contento interior, el esfuerzo bien encaminado y la motivación de convertir este viaje vital en una aventura para ayudarnos a nosotros mismos y a los demás. Desde luego, la práctica de las enseñanzas de los sabios más reputados de Oriente. Recomiendo visitar mi web www.ramirocalle.com para comprobar y asumir estas técnicas, tanto de relajación como de respiración, meditación y otras. Se aprende a practicar practicando.

Tengo una mente muy agitada. Ni por un momento dejan de venir pensamientos a mi mente, muchos mortificantes, que me crean tensión y ansiedad. He leído su obra El Libro de la serenidad y quisiera preguntarle si toda persona puede encontrar sosiego y qué hacer para lograrlo y para tener menos ansiedad. Todo ser humano ha tenido atisbos de serenidad. No está fuera de uno, sino dentro. Si la has sentido, es que te pertenece, y no se puede adquirir en una tienda ni en una farmacia. Es tu serenidad, pero tienes que poner los medios para que más a menudo se manifieste e impregne tu conducta mental, verbal y corporal. Los pensamientos incontrolados son los ladrones de la dicha interior y de la paz mental. La mente es muy ruidosa –llega a ser exasperante–, nos roba la quietud y nos hace estar de continuo en memorias y anticipaciones. Pero el pensamiento puede frenarse y dirigirse, en lugar de que seamos siempre pensados por los pensamientos. Para combatir la ansiedad, practica con asiduidad la relajación consciente y profunda. Y para tener una mente menos parlanchina, empéñate en vivir más el momento presente y practica unos minutos diarios la concentración y meditación.








ES PIONERO DE LA ENSEÑANZA DEL YOGA EN ESPAÑA, DISCIPLINA QUE IMPARTE DESDE HACE MÁS DE 30 AÑOS EN EL CENTRO DE YOGA "SHADAK". ES EL MÁS IMPORTANTE ESCRITOR ORIENTALISTA DE ESTE PAÍS Y UNO DE LOS MÁS IMPORTANTES DE TODA EUROPA. AUTOR DE NUMEROSAS OBRAS, HA ESTUDIADO EN PROFUNDIDAD LOS EFECTOS TERAPÉUTICOS DE LAS PSICOLOGÍAS ORIENTALES Y DE LOS APORTES DE LA MEDITACIÓN AL PSICOANÁLISIS, LA PSICOTERAPIA Y LA NEUROCIENCIA